Todos los días nos encontramos con innumerables consultas sobre las tallas de sujetador, lo cual es perfectamente normal ya que durante nuestra vida nuestro cuerpo suele cambiar por infinidad de circunstancias. Pasamos por la juventud, edad adulta y edad más adulta, si lo sé no he dicho vejez ¿por qué? pues porque no me considero vieja me considero mayor.
Durante cada etapa necesitaremos una talla y un tipo de sujetador determinados, además tenemos que contemplar que nuestro cuerpo suele tener cambios algunos deseados otros no: embarazo, obesidad… ahora me adelgazo, ahora hago deporte… escalo el Everest (no es mi caso), yo suelo estar en el grupo de me zampo una paellita con un surtido de helados de postre, lo que muy sabiamente he redireccionado a un arroz con verduras y sorbete de limón. Nada a dos pasos del vegamismo de moda, aunque son dos pasos que creo no llegaré a completar.
Como te contaba nuestro cuerpo cambia y nuestras necesidades también, por ello necesitamos una talla de sujetador adecuada, un sujetador que se adapte a nuestro cuerpo.
Empecemos… en el uso de los primeros sujetadores hay que escoger sostenes sencillos con tejidos muy adaptables sin aros o con aros flexibles en tejidos suaves, a esta edad necesitamos libertad de movimientos y especialmente que la prenda no oprima ni levante el pecho en exceso. El sujetador sólo debe dar algo de sujeción, nunca modelar, alzar o comprimir en exceso, esta etapa donde los pechos se están formando es muy importante respetar su forma y tamaño, por ello los sujetadores más recomendados pueden ser los tipo top o los sujetadores triangulares con formas y tejidos que respeten la forma natural del pecho.
En la edad adulta es cuando más cambios de forma especial si pasamos por la maternidad, en esta fase volvemos un poco a la juventud, necesitamos sujetadores muy cómodos que sujeten sin oprimir, si llevan aros que sean flexibles y en tejidos con algodón, sujetadores que se adapten a nuestros pecho.
En el resto de nuestra edad adulta tenemos una infinidad de modelos para hacernos sentir cómodas y guapas, sujetadores para todas las actividades y tipos de pecho, pero con una norma fundamental y muy importante “tu talla de pecho correcta”.
Cuando me comentan “si gasto la talla 100B la de toda la vida, desde que tenía…” me tiro de los pelos y me pongo azul “de toda la vida” o sea que llevas toda la vida llevando la misma talla así que muy probablemente en el 80% de tu vida has llevado una talla incorrecta. Luego oigo eso de que si los aros son perjudiciales… ¿perdona? perjudicial es torturar a tu cuerpo con una talla incorrecta, los aros, los tirantes, las copas, el propio sujetador pueden provocar efectos negativos si lógicamente utilizas la talla que no te corresponde. Por ello una recomendación es que si tu cuerpo cambia por subida o bajada de peso, realización de deporte o cualquier otra causa es necesario que revises tu talla de sujetador.
En condiciones normales sería recomendable revisar la talla de sujetador 1 vez al año.
¿Por qué revisar mi talla si mis sujetadores me van bien?
¿Cuánto hace que compraste tu último sujetador? o lo compraste y pensaste “este modelo no me va bien”, “la talla de esta marca es pequeña yo siempre utilizo la 100B y este suje no me va”, o “esos sujes tienen una forma rara no se adaptan bien”… Pues antes de llegar a estas conclusiones te recomiendo que revises tu talla tomándote las medidas en tu cuerpo, no en ese sujetador tan cómodo que te va tan bien y que seguramente tiene 1000 lavados y en su origen su contorno seguramente sería 1 ó 2 tallas más pequeño.
Con ello no quiero decir que todos los sujetadores que sean de tu talla correcta te tengan que ir a la perfección, también tienes que contemplar el tipo de pecho que tienes, forma y volumen. En mi caso por ejemplo aun no gastando una talla de pecho no muy grande, una 100B, tengo el pecho algo separado y ancho, digamos que el suje más correcto para mi tipo de pecho es un sujetador que recoja los senos muy bien desde los costados para que no sobresalga por los lados lo recoja y centre, y evitar que parte del aro no recoja la totalidad del pecho. Por eso me gustan los llamados sujetadores de control, que aunque de forma errónea son conocidos únicamente para las tallas de pecho abundantes realizan una magnífica función de sujeción y centrado del pecho de una forma muy natural y cómoda, muy recomendable para edades donde necesitamos una mayor modelación del pecho que por cuestiones de edad, lógicamente, suele perder firmeza.
¿Si tengo el pecho pequeño qué tipo de sujetador necesito?
Los modelos de sujetadores triangulares además de ser tendencia son ideales para el pecho pequeño, te proporcionan una imagen actual y sexy, su escote en pico da una sensación de más volumen. Tenemos muchas consultas sobre los sujetadores push-up, sobre si son recomendables o no llevarlos a diario. Hoy en día los sujetadores son casi prendas de ingeniería, muy estudiadas para cumplir su función estética, estructural y de confort a la perfección, por ello la recomendación es como siempre “llevar la talla correcta”. En la actualidad encontrarás modelos con diferentes niveles de realce donde puedes escoger un realce medio para el día a día y un push-up de vértigo para ocasiones especiales.
El sujetador no debe oprimir en exceso ni crear roces indeseados lo que nos lleva a un punto importante: ¡Qué bonito es por fuera! Nos enamoramos de un sujetador por su estética, color, tela, textura, forma… pero ¿y su interior? Presta atención a los acabados especialmente costuras, que estén rematadas de forma correcta, que las copas y los aros sean adaptables o flexibles, de forma especial en modelos deportivos. Un foam de espuma de mala calidad además de ser rígido no dejará transpirar el pecho. Busca siempre marcas reconocidas donde podrás verificar la calidad de sus prendas. Hoy en día hay marcas reconocidas donde puedes escoger entre un gran abanico de precios. Las marcas te ofrecen unos mínimos saludables muy a tener en cuenta: tejidos adaptables, patronajes estructurales, tintes no nocivos y en muchos modelos la aplicación de tejidos tecnológicos con cualidades extra muy interesantes que también alargan la durabilidad de la prenda.
Ten en cuenta que el sujetador es una prenda que está en contacto directo con tu piel más sensible y zonas de sudoración como son las axilas, que sea adaptable, transpirable, suave y muy importante libre de tintes, tejidos o elásticos no recomendables.
¿Qué sujetadores son adecuados para pechos voluminosos?
Los sujetadores de control son conocidos para pechos grandes pero en realidad son sujetadores adecuados para todas las tallas. Estos sujetadores tienen un patronaje muy determinado para recoger y sostener el pecho desde los costados centrándolo y modelándolo para proporcionar un pecho natural. Son sujetadores muy cómodos y están pensados para ofrecer un buen soporte de forma muy cómoda. Si tu pecho es voluminoso estos sujetadores te van a quedar siempre a la perfección y son muy recomendables si deseas controlar la zona de pecho y laterales.
Los sujetadores reductores son una opción si deseas controlar el volumen del busto, dan un efecto visual de menos pecho ofreciendo redondeado y controlando los senos. Otorgan una sujeción y control perfectos.
Si gastas una talla de pecho grande y tu pecho es de “burbuja”, unos senos firmes muy marcados en su forma, más comunes en edades jóvenes o mujeres con implantes donde el pecho tiene una forma redondeada muy marcada, verás que los sujetadores a partir de las tallas 105/110 pueden tener refuerzos interiores imperceptibles, algunos tejidos con más soporte o tirantes más cómodos. Básicamente las marcas adaptan siempre la prenda a la talla correspondiente lo que siempre te asegura un buen resultado a la hora de escoger un sujetador en una talla completa.
Si tienes dudas sobre cualquier aspecto a la hora de comprar un sujetador lo tienes fácil, infórmate siempre antes, puedes llamarnos o enviar tu consulta con tus dudas, estaremos encantadas de atenderte.
Aquí te dejo el link a nuestra tabla de medidas para que puedas comprobar cual es tu talla correcta: